¡EMPEZAMOS EL TEATRO SOCIAL!


La segunda sesión de la asignatura se basó en una actividad práctica en la que realizamos varias dinámicas relacionadas con el teatro del oprimido de Augusto Boal.
Resultado de imagen de augusto boal
Augusto Boal
La sesión tenía por objetivo que todos los participantes pudieran expresarse y comunicarse con el resto de la clase a través del propio cuerpo, generando así confianza entre los compañeros.
La primera de las dinámicas consistía en hacer un gran círculo, cada uno de los participantes tenía que salir al centro de éste para decir su nombre y seguidamente efectuar un gesto de algo que le gustara a la persona, este gesto se acompañaba de un sonido. Seguidamente, todos los compañeros salíamos al centro del círculo para imitar lo que acababa de efectuar el compañero o compañera. La dinámica finalizó cuando todos y cada uno de nosotros realizamos esta acción.

La segunda actividad consistía en que el profesor ponía música en el aula y nosotros teníamos que desplazarnos libremente por el espacio de manera relajada, con la única premisa de no chocar con alguno de los compañeros. El profesor, después de unos minutos nos explicó unas reglas en las que decía que si daba una palmada, debíamos de pararnos y mirar a aquel compañero o compañera más cercano a nosotros, cuando daba dos, continuábamos caminando por el aula.

La tercera dinámica consistía en agruparnos por parejas, una persona ejercía de guía y el/la otro/a se dejaba guiar. Se colocaba la mano de manera próxima a la cara del compañero o la compañera que se dejaba guiar y éste tenía que avanzar por el espacio fijándose únicamente en la mano del compañero o compañera. Una vez finalizado, se cambiaban los papeles.

La siguiente actividad se realizaba por parejas también, ambos/as se cogían de la mano y una cerraba los ojos, convirtiéndose en cámara, la otra persona era el/la fotógrafo/a. La persona que hacía de fotógrafo/a tenía que caminar por la clase y colocarse en tres lugares agradables para el/ella; apretando la mano del compañero/a para que éste/a abriera los ojos y los volviera a cerrar, como si hubiera hecho una foto. Después se cambiaron los roles y esta vez el/la fotógrafo/a tenía que colocarse en aquellos tres lugares que menos le gustaran de la clase y volver a repetir la acción; apretar la mano del compañero/a para que éste/a abriera los ojos y los volviera a cerrar para hacer una fotografía. La dinámica finaliza efectuando dos grupos, los que habían ejercido de fotógrafo/a la primera vez por un lado, y los que habían hecho de fotógrafo/a la segunda vez, por otro. El objetivo era que en grupo, los compañeros/as crearan una imagen manteniendo contacto físico entre ellos/as del sentimiento que había provocado en ellos esas tres imágenes.

La siguiente dinámica consistía en desplazarse por el espacio individualmente, buscando un punto que nos gustara del aula y pararnos delante de él. Repetimos la acción hasta 3 veces, buscando diferentes puntos, en el último punto, teníamos que efectuar un gesto y quedarnos parados en él. Cuando el profesor decía el número 1, debíamos ir sincronizados al primer punto de referencia. Cuando el profesor decía el número 2, íbamos al segundo punto; cuando decía el tres, hacíamos el gesto y nos quedábamos quietos a modo de estatua.

La ultima dinámica, se realizaba por parejas, una persona delante de otra, una hacia movimientos para que la otra los imitara, como si de un espejo se tratase, durante unos minutos e intentando mantener el compás de la música que en el aula sonaba. Después se intercambiaron los papeles.

Con todo esto hemos aprendido la importancia que tiene el hecho de crear cohesión en un grupo y sentimiento de pertenencia al mismo, puesto que para el correcto funcionamiento de éste, es importante la colaboración e implicación de todas y todos.  Es cuestión de imaginarnos un símil: una máquina (el grupo) no puede funcionar con normalidad si todos los engranajes (personas pertenecientes al grupo) no trabajan entre sí.

Comentarios